El grupo de origen alemán, que aumentó un 8 % su facturación en 2015, se mantiene como líder mundial en el mercado de filtros para alcanzar su objetivo de abastecer a buena parte de la industria automotriz.
La temporada 2015 concedió los números que piden un festejo a todo trapo con salchichas, barra libre de cervezas y arengas de que no decaiga. El fabricante de componentes para vehículos Mann+Hummel registró una facturación de 3.000 millones de euros durante el año pasado, lo que supone un incremento del 8% en comparación con 2014, según los datos provisionales presentados a la prensa.
Los responsables de la firma explicaron que las cifras de 2015 le permitieron ampliar su posición como líder del mercado de filtros en la industria autopartista y también en el sector de la ingeniería en el ámbito internacional.
El presidente y consejero delegado de la empresa, Alfred Webber, afirmó que el crecimiento de los ingresos se aceleró en 2015, a pesar de la difícil situación en los mercados de Brasil, Rusia y China. Los números del balance encuentran a la empresa en plena celebración. «
En 2016, año de su 75º aniversario, Mann+Hummel seguirá su estrategia de crecimiento y consolidará su imagen de marca», añadió el máximo responsable del fabricante de componentes para automóviles. Desde que abrió sus persianas, Mann+Hummel pasó de ser una pequeña planta proveedora de unos pocos clientes a convertirse en líder del mercado mundial de filtración. La compañía creció hasta convertirse en el mayor fabricante mundial de filtros de combustible, con un plantel de unas 16.000 personas en sesenta localidades de los cinco continentes.