Nissan anuncia su decisión de adjudicar a sus plantas de montaje en la Zona Franca de Barcelona y en Montcada la producción de su nueva furgoneta pick up.
La verdadera reconversión consiste en el cambio de la naturaleza del producto.
Los cambios internos de los próximos años serán radicales. En primer lugar, un cambio de la naturaleza del motor para usar otros combustibles distintos de los derivados del petróleo, cambio exigido por la escasez de este y por las consecuencias medioambientales de la combustión.
También habrá cambios importantes en los sistemas incorporados relacionados con la seguridad, las ayudas a la conducción y la prevención inteligente de accidentes. Y también por el uso de nuevos materiales de menor peso, pero de mayor rigidez estructural.
En el mundo del automóvil la innovación y el valor añadido no están en la operación de montaje final, sino en el diseño y en la fabricación de los componentes. El montaje implica buenas tecnologías de producción y supone, aunque cada vez esté más robotizado, una importante carga de mano de obra. Por ello estas plantas son tan sensibles a los costes salariales y a la productividad. El fenómeno de deslocalización puede retrasarse con esfuerzos pasivos, pero es imparable e irreversible.