La Universidad de Florida desarrolló un sistema más económico que las tecnologías ya conocidas, que permite convertir las luces infrarrojas en un visor nocturno con sólo una lámina.
Esta superficie está basada en la misma tecnología que las últimas pantallas LED orgánicas utilizadas en televisores y teléfonos móviles.
Este sistema permite destacar objetos y obstáculos que serían invisibles en la oscuridad gracias a las capas de LEDs que convierten la luz infrarroja en un espectro visible.
Además, esta tecnología es muy eficiente al consumir solo entre tres y cinco volts de energía.
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