En base al Informe Especial realizado por la UIA sobre el impacto del COVID-19 en la industria, AFAC ha realizado un reporte específico para el sector autopartista. De las más de 1.300 empresas encuestadas de diversas actividades, regiones y tamaño; la fabricación de autopartes representó el 9% del total (118 autopartistas).
La industria evidencia una significativa cantidad de empresas que están afrontando importantes dificultades financieras y operativas, en donde la amplia mayoría de las empresas atraviesan una fuerte interrupción de la producción y de las ventas. Los indicadores muestran que esta situación es aún más profunda y grave para el sector autopartista, compuesto mayormente por pequeñas y medianas empresas (90%).
Del total de empresas pertenecientes al autopartismo, el 76% no está produciendo. Este porcentaje es significativamente mayor al de la industria en su conjunto, que alcanza el 56%. Asimismo, el 23% está produciendo con fuertes caídas y solo el 1% produce igual que antes del aislamiento social preventivo y obligatorio.
En relación a las ventas, ninguna de las empresas del sector autopartista ha logrado mantener el nivel de facturación previo al aislamiento. El 77% sufrió caídas de más del 60% de sus ventas y más del 50% del total de empresas manifestaron que la reducción es de entre 90% y 100%. Al comparar el sector con el total de la industria, nuevamente el impacto de la caída en el autopartismo es mucho mayor.
Respecto a la cadena de pagos, al igual que con el resto de la industria, las empresas están priorizando el pago de salarios antes que el pago a proveedores, impuestos y servicios. De esta manera se espera que surjan restricciones al momento de poder retomar las actividades productivas
A pesar de ello, para el mes de abril, solo el 8% de las autopartistas relevadas manifestaron poder pagar los salarios al 100%. El 92% no pudo afrontar el pago de salarios o pudieron hacerlo sólo parcialmente.
El 73% de las autopartistas no logró llegar a un acuerdo de suspensión en del marco del artículo 223 bis, y el 49% manifestó haber licenciado a más del 50% de sus empleados.
Asimismo, menos de la mitad de las empresas autopartistas logró acceder a la Línea de Financiamiento del 24% (47%). El 31% intentó acceder, pero no logró obtenerlo y el 22% no lo ha intentado. Entre las principales razones o dificultades para acceder, se manifestaron un acceso parcial (debajo de lo declarado por el 931) por límite del banco (26%), el banco niega tener operativa esa línea de crédito (12%), dificultades para contactarse con el banco (12%), la empresa no encuadra como PyME (10%), entre otras.
Respecto a la imposibilidad de cobrar cheques, el 89% de las empresas tuvo problemas con esta cuestión. Este porcentaje supera en 8 p.p. al relevado para el total de la industria. A su vez, del total de empresas que no pudieron cobrar en tiempo y forma, el 17% tuvo entre 60% y 100% de los cheques sin cobrar, el 32% declaró una incobrabilidad de entre 30% y 60% de los cheques y la mitad de las empresas consultadas manifestó no haber podido cobrar menos del 30%. Solo el 11% de las empresas del sector pudieron cobrar cheques sin inconvenientes, mientras que para la industria este porcentaje fue cercano al 20%.
Por otro lado, una gran cantidad de empresa logró acceder al Programa de Asistencia de Emergencia a la Producción y al Trabajo (ATP) (79%), mientras que un 11% no logró obtenerlo y un 10% no intentó inscribirse.