La empresa norteamericana presentó en el SEMA Show 2010 una modificación de su deportivo pensada para aprovechar sus prestaciones en el ambiente de las carreras.
Según la automotriz el objetivo de esta preparación es trasladar las excelentes actitudes del carro en la calle a las pistas de competición. Además muestra el compromiso de Chevrolet de desarrollar nuevas partes para los usuarios interesados en el mundo de competencia.
Los cambios exteriores están pensados no solo en un sentido estético sino que también apuntan a mejorar la performance en pista. Se le han agregado partes de fibra de carbono que incluyen alerón trasero ajustable, difusor frontal y paneles exteriores (que presentan un peso mucho menor que el del Camaro de serie).
El flamante modelo es movido por un propulsor V8 de 6.2 litros al que se acopla una caja manual de seis velocidades.
Para lograr una menor carga se le han quitado varios elementos del vehículo de producción tales como los asientos traseros, las alfombras y el sistema de audio. La butaca del conductor tiene cinturones de cinco puntos y los pedales son de estilo deportivo.
El exterior presenta un color blanco metálico de bajo brillo que contrasta con las piezas de fibra de carbono y las inscripciones de competencia y detalles en rojo. Las llantas de 20 pulgadas han sido diseñadas especialmente para esta versión.
Fuente: Terra
