Guillermo Araya es ingeniero aeronáutico, vive en Gales y forma parte del equipo que armó el prototipo de un auto capaz de alcanzar 1.600 km/h.
Integra el equipo que acaba de terminar el diseño aerodinámico del auto que alcanzará una velocidad de 1.600 km/h, es decir, casi el doble de la que alcanza un avión comercial y superando la velocidad del sonido, a nivel del mar. Lo que pretenden los científicos es romper un récord mundial, pero también incentivar a que los jóvenes estudien carreras que estén relacionadas con la ingeniería.
"El proyecto Blooddhound SSC" es el nombre del emprendimiento que comenzó a llevarse a cabo en el 2007, y del que está orgulloso de participar Araya. Ya terminaron la etapa del diseño del auto y lo que harán ahora es fabricar el vehículo para probarlo en el desierto. El lugar que escogieron es una zona de Sudáfrica. La idea es que el auto esté andando en octubre del 2011, pero ya empezaron a buscar voluntarios para preparar el terreno de prueba, que tendrá una extensión de 18 kilómetros. "Si bien mi trabajo ya terminó, me encantaría ver la prueba. Es como ver un cohete desplazándose por la tierra", dijo el ingeniero argentino, nacido en la provincia de San Juan.