ZF: Plan B

El tercero más grande del mundo por ventas anuales apunta a desarrollar mayor flexibilidad en sus fábricas ante la ralentización de los programas de vehículos eléctricos en la industria.

ZF buscar readaptar sus instalaciones a fin de que su producción de piezas pueda reajustarse rápidamente de vehículos de combustión interna a vehículos eléctricos o híbridos.

El anuncio realizado por el gigante tecnológico alemán de una inversión de 500 millones de dólares en su planta de transmisiones da cuenta de la estrategia de electrificación, mientras sus clientes fabricantes de equipos originales ralentizan sus propios planes para el mercado de vehículos eléctricos.

Enfrentada repentinamente a una nueva era de incertidumbre a medida que los fabricantes de automóviles cambian sus planes, ZF pretende flexibilizar sus plantas de fabricación, capaces de cambiar fácil y rápidamente la producción entre piezas de vehículos con motor de combustión interna y componentes para vehículos eléctricos o híbridos.

La planta Gray Court del Grupo ZF, ubicada cerca de Greenville, Carolina del Sur, pronto podría servir de modelo para el resto de la empresa, ya que se prepara para construir cientos de miles de transmisiones cada año para vehículos con motor de combustión interna, vehículos eléctricos e híbridos por igual, así como vehículos comerciales y de pasajeros.

Desde su creación en 2010, la historia de Gray Court es una de crecimiento continuo a través de la introducción de tecnologías de alta calidad y muy avanzadas para la industria de la movilidad. “A medida que las industrias a las que servimos evolucionan, también lo hace ZF Gray Court, que está una vez más en el centro de la transformación de la movilidad”, explicó Stephan von Schuckmann, miembro de la Junta Directiva de ZF. “ZF Gray Court es nuestra principal planta de fabricación flexible de Norteamérica, que produce tecnologías para el presente y el futuro, tanto para vehículos de pasajeros como para vehículos comerciales. Este emplazamiento es el primero en el que reflejamos la transición que la industria y el mundo están llevando a cabo”.

Nuevas líneas

La nueva inversión de 500 millones de dólares apoyará varias nuevas líneas de productos en la planta e incluirá el lanzamiento en Norteamérica de su cuarta generación de transmisiones de ocho velocidades para híbridos enchufables. Esta transmisión se fabrica actualmente en Alemania y se utiliza en los modelos BMW Serie 7 y X5. La producción de estas transmisiones se acelerará hasta 2025 y se llevará a cabo paralelamente a la producción de transmisiones para otros tipos de vehículos.

El nuevo gasto se suma a una inversión de 200 millones de dólares en la planta para empezar a producir la transmisión automática de ocho velocidades PowerLine de ZF para vehículos comerciales a finales del año pasado. La PowerLine, que se está fabricando para tres de los principales fabricantes de vehículos comerciales de Estados Unidos, tiene la flexibilidad de producirse en variantes híbridas suaves e híbridas enchufables.

Jeff Rude, director de operaciones, sistemas de transmisión y soluciones para vehículos comerciales de ZF, dijo que la producción de PowerLine en la planta emplea nuevas tecnologías diseñadas para aumentar la flexibilidad, incluido el uso de vehículos guiados automatizados para mover los componentes por la línea en lugar de un sistema de cintas transportadoras, así como nuevas formas de realizar las pruebas. “Queríamos crear la solución más flexible posible”, afirmó.

Este deseo se debe en parte a la incertidumbre sobre el ritmo de electrificación de los vehículos en todo el mundo, especialmente en Norteamérica, donde el crecimiento de las ventas de eléctricos se ha ralentizado. Los proveedores se apresuran a reaccionar cuando Ford, General Motors y otras empresas modifican sus calendarios de producción de vehículos eléctricos y anuncian retrasos. Estos cambios de calendario pueden resultar costosos para los proveedores que confían en la regularidad de los pedidos de piezas.

Cambio de planes

Ajustar los calendarios puede ser un difícil equilibrio para los proveedores, que intentan prepararse para un futuro electrificado sin que los agarre desprevenidos si ese futuro tarda en llegar más de lo que los fabricantes de automóviles pensaron en un principio. “Prácticamente todos los fabricantes de equipos originales tienen una cláusula que dice que las previsiones de volumen son sólo eso: no son vinculantes”, sostuvo al respecto Tom Manganello, copresidente del grupo de la industria automovilística del bufete de abogados Warner Norcross + Judd.

La filosofía de fabricación flexible de Gray Court apunta a ayudar a mantener la agilidad del proveedor y servir de modelo para otros proyectos de plantas en el futuro. Como muchos otros proveedores, la transición a la producción de piezas para vehículos eléctricos ha sido difícil para ZF. En rigor, se rumoreaba en el mercado que la empresa estaba considerando el mes pasado recortar hasta 12.000 puestos de trabajo en Alemania para 2030 en medio de la transición a la electrificación. Un portavoz de ZF dijo que esos temores se basaban en “escenarios extremos” y “suposiciones anticuadas”.

Proceso de regionalización

La inversión en Carolina del Sur también se produce en un momento en el que el gobierno de Estados Unidos pone en marcha nuevos incentivos y normas para estimular una mayor producción local de vehículos y piezas, y en el que ZF intenta que sus cadenas de suministro sean más regionales.

Debido a estas nuevas normas, von Schuckmann afirmó que el proveedor quiere aumentar al máximo el número de componentes procedentes de Norteamérica. Según la empresa, su objetivo es que el 80% de sus componentes procedan de la región. “Queremos asegurarnos de que no dependen de cadenas de suministro del otro lado del mundo”, comprometió el directivo.  

ZF se jacta de su apuesta por un futuro sostenible y se ha fijado el objetivo de ser totalmente neutra para el clima en 2040. Esto incluye no sólo el funcionamiento interno y los resultados de la empresa, sino también el compromiso de contribuir a la sostenibilidad a largo plazo del ecosistema de la movilidad con configuraciones alternativas de la cadena cinemática.

Para apoyar sus objetivos de sostenibilidad, en 2020 ZF anunció que dedicará esfuerzos de investigación y desarrollo a componentes y sistemas de vehículos híbridos y eléctricos. También estableció una estrategia que incluye la reducción del uso de productos y materiales que causan gases de efecto invernadero, centrándose en el reciclaje, la reutilización y la refabricación, y Gray Court pretende ser un ejemplo de esos esfuerzos.

Podes compartir esta nota

Contacto

Un sitio multimedia integral enfocado específicamente al aftermarket, la postventa y la industria automotriz con la información compendiada y resumida como ningún otro medio lo puede ofrecer, con noticias elaboradas por un equipo de profesionales con corresponsales en Brasil y México. 

Por favor, activa JavaScript en tu navegador para completar este formulario.